Seleccionar página

¿Vosotros también lo notáis? Ya se están manifestando los fantasmas de las navidades pasadas. Huele al asado de abuela o al de mamá. Y ninguna de las dos están ya. Suena de pronto el timbre y un estremecimiento nos recorre, porque aunque sabes que es tu hermana, o tu tía o tu primo…, tiene una forma de tocar el timbre que… ¡parece increíble!, es exactamente igual a la de abuelo o papá, que tampoco llamarán nunca más a tu puerta. “¿Quién va?”, preguntas al aire aunque sabes la respuesta, porque quieres que te resuene dentro lo que respondía siempre la persona querida que ya no está: “¡Gente de paz!”. Siempre la misma respuesta: “¡Gente de paz!”… Son gente de paz; los fantasmas de las navidades pasadas son gente de paz. Dejémosles entrar.

Estas fechas son difíciles para casi todos los que no somos rabiosamente jóvenes. Los fantasmas, los queridos fantasmas de las navidades pasadas nos visitan. Abramos las puertas. Dejemos que entren. Recibámoslos con toda la alegría que podamos reunir estos días. ¡Empieza la Navidad, que nos invada la nostalgia! Si cada año la Navidad nos rompe un poquito el corazón, es porque algo sigue muy vivo entre los que ya no están y los que sí. ¡Que no muera nunca!

Hoy quiero mandar un abrazo grande a los que echáis de menos a alguien, a los que os sentís muy solos, a los que ocupáis una habitación en el hospital, a los que estáis cuidando de un familiar dependiente y no podéis más, a los que compartís nochebuena y vida con alguien que no se acuerda ya de nada mientras que los recuerdos hoy a ti te golpean sin piedad… Somos muchos los que estos días compartimos un nudo en la garganta. Casi todos estamos un poco más solos en Navidad.

Y aún así hagamos un esfuerzo y busquemos un rato para el turrón y para brindar. Por ellos, por lo que fueron, por lo que perdimos, por nosotros, por lo que fuimos y por lo que somos, por lo bueno que vivimos, por lo que aprendemos de lo malo. Por afrontar con valentía los desafíos de este loco presente, que casi nunca es lo que soñamos.

Navidad es familia, es un deseo de paz y luces de colores que representan la ilusión, la esperanza, que no podemos perder, en un futuro que intentaremos que sea mejor. Ánimo y feliz Navidad para todos.

Puede que también te interese

Los verdaderos magos del día de Reyes

Los verdaderos magos del día de Reyes

Mientras escribo estas líneas resuena a lo lejos el bullicio de la cabalgata. Sé cuándo pasa un rey mago porque las voces de los niños se elevan...

Nochebuena de 2023

Nochebuena de 2023

Esta noche es Nochebuena. Llega la noche de la mala suerte —lo dijo Larra—, la noche de los espíritus —lo dijo Dickens—, la de las brujas —lo dijo...

¿Hacemos un descanso del mundo real?


Cuentos para respirar hondo y seguir adelante 💪

En el aire. Cuento de Laura Rivas Arranz

En el aire

Ha caído la noche sobre este día terrible. Entran por la ventana el rumor de los árboles, un incansable canto de grillo y el chapotear de la fuente en la plaza. Para dejar de estar sola enciendo la radio. Descubro que soy una de ellos; de esa gente que en lo oscuro de...
Se saldan maldiciones. Laura Rivas Arranz

Se saldan maldiciones

He salido de casa para quitarme al aire el calor del radiador y el parpadeo del fluorescente. El cielo está atiborrado de pájaros. Hace sol. Es tarde para evitar a una vieja que desde hace meses pide dinero en lengua desconocida y te escupe maldiciones cifradas si...
La nube. Cuento de Laura Rivas Arranz

La nube

Hace ocho días tomé la decisión de salvar nuestros moribundos vídeos VHS. He ido a buscar el resultado a la tienda de fotografía. Los vídeos familiares caben en una memoria USB. Y sobra espacio. La ventaja es que puedo subirnos a todos a una nube para que nunca...
Bajar al río. Laura Rivas Arranz. Microcuento

Bajar al río

No se tarda mucho en llegar al río. Culebrea domesticado cerca de la ciudad. Desde la cima de la cuesta, a lo lejos, el río borda su papel chispeando luz de sol entre los árboles. Engaña tan bien que apetece acercarse enseguida, y sentarse a comer a su lado. Desde el...
Portada del cuento El hombre de negro de Laura Rivas Arranz

El Hombre de Negro

Si el tiempo real y el de los sueños coincidieran, cabría la posibilidad de que se encontrara conmigoLa primera vez que dudé de él fue en un mercadillo. Era un domingo soleado y frío. Yo miraba unas pulseras de cuero: —Son bonitas, ¿qué te parecen? Él no me respondió....
Vida embrujada. Laura Rivas Arranz

Vida embrujada

Antes de que la vida se me embrujara a mí me gustaban las tormentas. Tras el cristal del balcón, rebuscaba entre tejados y antenas de televisión jirones de cielo por si allí la electricidad culebreaba. El relámpago llenaba la oscuridad de luz plata y yo calculaba...
Madrugada tranquila en barrio peligroso. Cuento de Laura Rivas Arranz

Madrugada tranquila en barrio peligroso

En la penumbra del dormitorio viven los fantasmas. Lo sé porque si despierto entre la noche los escucho desplazarse y respirar. La bombilla led de cuatro coma nueve vatios los espanta. Por eso busco a tientas el interruptor de la lámpara en la mesilla y lo pulso con...
Velatorio 3. Laura Rivas Arranz., Cuento

Velatorio 3

—Hace un frío tremendo, Mónica… Me lo ha dicho mi madre con los ojos en lágrimas. Me levanto como si confiara en que mis pies sostendrán el peso de mi cuerpo. Me sostienen. Salgo de la habitación, y golpeo la primera puerta que aparece en mi camino. La voz del...
La grieta. Cuento de Laura Rivas Arranz

La grieta

Hace doce meses una grieta partió por la mitad el jardín. La tierra se abrió en dos y emergió de la nada una sima profunda . Han venido a verla dos geólogas, una directora de documentales, un topógrafo, una ingeniera técnica y un espiritista. Nadie me ha dado una...
Isla Veintidós. Cuento de Laura Rivas Arranz

Isla Veintidós

Por las noches, cuando llega el silencio y ululan las lechuzas, si tengo la fortuna de hallarme en casa, cierro bien puertas y ventanas. En la cama, a cubierto bajo las mantas, cuando el reloj de la torre ahuyenta el piar de los murciélagos con doce campanadas, yo...

 Novelas


Dos historias sobre la dificultad de habitar mundos tan diferentes a los que soñábamos

Portada de la novela Pasos en la escalera de Laura Rivas Arranz

Pasos en la escalera

Enero. Un día al atardecer alguien cae al vacío por la ventana de un edificio.

Cuatro meses antes, una universitaria principiante se instala en el sexto piso. Subiendo y bajando por las escaleras, irá encontrándose con su vecinos: el niño-Batman, la niña fea, el médico del botiquín desmantelado, una abuela que extravía recuerdos, la dependienta que no vende, un escritor con batidoras en la maleta.

El perturbado del séptimo sabe que puedes leer sus pensamientos. En lo alto del edificio un astrónomo deprimido vigila con obstinación la luna.

Interesados, suban hasta la azotea. En caso de pérdida, sigan el rumor de pasos en la escalera.

Valoraciones de lectores 4,1 sobre 5. Pasos en la escalera
Portada de la novela "Rompecabezas"

Rompecabezas

Un colegio es un edificio gris habitado por alumnos de primera, de segunda y de tercera clase. Un lugar frecuentado por atracadores de recreos, ladrones de voces, niños invisibles. Esta es una historia sobre colegios, rompecabezas y niños algo rotos.

La narración abarca dieciséis horas en la vida de tres adolescentes, al borde de la mayoría de edad. Antes de adentrarse para siempre en el país de los adultos, los tres jóvenes exploran los rincones oscuros del colegio...

Valoraciones de lectores. 3,8 sobre 5. Rompecabezas
laurarivasarranz.com
Resumen de privacidad

Esta web utiliza cookies para que podamos ofrecerte la mejor experiencia de usuario posible. La información de las cookies se almacena en tu navegador y realiza funciones tales como reconocerte cuando vuelves a nuestra web o ayudar a nuestro equipo a comprender qué secciones de la web encuentras más interesantes y útiles.